Polietileno



El polietileno de baja densidad se representa con el número cuatro en la clasificación de los plásticos.
Su abreviatura en español es PEBD, y en inglés sería LDPE, por lo que te le puedes encontrar de las dos maneras.
La historia de este tipo de plástico es que fue descubierto accidentalmente por los estudios de alta presión del etileno que Michaels Perrin realizó en Ámsterdam en 1900.
 Y es el primer polímero de etileno, por lo que sabemos que se obtiene a partir de este material sometiéndole a altas temperaturas y presión. Todo ello se realiza en presencia de un catalizador de radicales libres.
 
Este tipo de material ofrece unas propiedades muy características como que su densidad ronda sobre los 0.92 g/cm3 y posee una alta resistencia química y térmica ya que es capaz de soportar hasta 95ºC; aunque a temperaturas superiores se vuelve deformable y flexible por lo que es termoplástico.
Tiene muy baja absorción del agua.
Su baja densidad es gracias a su estructura de macromoléculas muy ramificadas entre ellas (hay unas veinte y cuarenta ramas por cada 1000 átomos de carbono) lo que provoca que haya más distancia entre las moléculas y el plástico tenga menos densidad. Esta estructura también da otras tres características de este plástico como
una buena resistencia al impacto, una gran flexibilidad y una cristalinidad inferior a la del HDPE y al PE ya que son macromoléculas lineales.
 



El polietileno de baja densidad es un material que posee un color lechoso, que dependiendo de su espesor puede llegar a ser transparente.
Este hecho hace que se trate de un material difícil de imprimir, pintar o pegar sobre él.
En cambio, es muy fácil de trabajar con el mediante métodos como la inyección o extrusión.
Es muy barato, como la mayoría de los polietilenos, de ahí su amplio uso frente a otros tipos de plásticos.

 


Este tipo de plástico sí que es reciclable, y aunque no se realiza con tanta facilidad como con el polietileno de alta densidad, es el plástico más reciclado en España.
Hoy en día, su reciclado ha sido disminuido debido al nuevo uso de polietilenos lineales, aunque en sur de España sigue teniendo una gran importancia debido a la actividad agraria.
A la hora del reciclaje es muy importante separar bien todos los tipos de plásticos ya que cada plástico tiene unas características propias y si se juntaran con la de otros plásticos no obtendríamos un producto de calidad.
El polietileno de baja densidad presenta un gran inconveniente, y es que a la hora de su reciclado pierde la elasticidad por lo que habría que añadir polietileno virgen para contrarrestar la perdida y que, en un futuro, no cause ningún problema en el rendimiento de los equipos de extrusión.
Aunque presente este inconveniente es muy importante reciclarlo ya que este tipo de plástico no es biodegradable y puede llegar a tardar hasta ciento cincuenta años en descomponerse.
Cuando se descomponen emiten metano y etileno y la tasa de emisión aumenta con el tiempo. Las emisiones ocurren cuando los materiales plásticos están expuestos a la radiación solar ambiental, ya sea en el agua o en el aire, pero en el aire, las tasas de emisión son mucho más altas. El polietileno de baja densidad emite estos gases cuando es incubado en el aire a velocidades aproximadamente 2 y 76 veces más altas que cuando se incuba en agua, en el caso del metano y el etileno, respectivamente. Está muy presente en la contaminación de la tierra como en los insecticidas.
Este material es apto para alimentos y bebidas ya que no presenta elementos tóxicos.
 
En cuanto a sus usos y aplicaciones, su flexibilidad lo convierte en un material ideal para la fabricación de bolsas y sacos de plástico (tanto de supermercado como de basura) así como para la elaboración de film transparente, tanto doméstico como industrial.

 

 

 

Otros objetos en cuya elaboración se utiliza este material pueden ser tuberías, juguetes, recubrimiento y aislamiento de cables, envases y tapones de plástico, cartones de leche (como una de las capas aislantes), y piezas de automóviles, etc.
En los laboratorios nos podemos encontrar este tipo de plástico en productos como pipetas desechables pasteur, frascos lavadores y frascos cuentagotas.
También es muy frecuente encontrarlos en envases del sector cosmético, así como para aplicaciones industriales; aunque es la agricultura la industria en la que es más utilizado.
A modo de resumen, el polietileno de baja densidad presenta una serie de ventajas tales como que es un producto de bajo coste, lo que incentiva su compra y producción, es resistente a impactos y a bacterias y ácidos, es flexible y elástico, es una buena barrera al vapor de agua y tiene una vida útil bastante larga; y desventajas como que es una baja barrera para los olores, aromas y gases como el oxígeno, tiene una alta migración de grasas y aceites y presenta dificultades para imprimir, pintar o pegar sobre él.



 

 
 
 
 
 

A la hora de mirar alternativas para mejorar nuestro planeta debemos de tener en cuenta de que el polietileno de baja densidad es un plástico bastante común y además, no es biodegradable por lo que reducir su uso ayudaría bastante con la contaminación. 

Os planteamos un reto y es que durante una semana probeis a:

- Cambiar las bolsas de plástico por una de tela o fécula de patata.  

- Utilizar vasos o botellas reutilizables. 

- Utilizar pajitas de papel o de metal.

- Cambiar las tapaderas de plástico por unasde silicona reutilizables. 

De esta manera, tan solo estando una semana usando estas alternativas, estaríamos evitando que toneladas de plástico se desecharan y gran parte acabara en el océano afectando a la vida de los animales.

Si nos paramos a pensar, realizar este reto de forma permanente tiene beneficios para todos ya que, nosotros ahorraríamos dinero al no tener que estar comprando continuamente las cosas de plástico, y la contaminación del medio ambiente se reduciría ya que:

- Una bolsa de plástico tardar es descomponerse 150 años.

- Una botella de plástico tarda en descomponerse 500 años.

- Una pajita de plástico tarda en descomponerse 200 años.

- Una tapadera de plástico tarda en descomponerse 1000 años. 

 

A modo de curiosidad; la empresa Thread International convierte las botellas de plástico que recoge de las calles y canales de Haití, en tejidos sostenibles. Este tejido, hecho al 50% con PET reciclado, se ha hecho muy popular entre algunas marcas como Timberlake, Kenneth Cole y la marca de ropa de cama Kelly Lane.

El bolígrafo pilot B2P de tinta de gel y retráctil es el primero del mundo en estar hecho de botellas de plástico recicladas y cuenta con la ventaja de ser recargable.

A continuación, podeís realizar el siguiente kahoot para poner a prueba lo que habeis aprendido:

Kahoot Polietileno